El presidente del grupo Renault en Fórmula 1, Luca de Meo, ha explicado en el diario francés L’Équipe el motivo de su decisión de cerrar Viry-Chatillon.
Desde que empezaron los rumores de que Renault dejaría de fabricar motores para la Fórmula 1, han sido muchas las protestas por parte de los empleados que trabajan en el programa de Fórmula 1 en la planta de Renault de Viry-Chatillon. Esta decisión de dejar de fabricar motores para la categoría reina significa que, a partir de 2026, el equipo Alpine deberá cambiar de suministrador de motor. Por lo que todas las actividades relacionadas con la Fórmula 1 en la fábrica francesa cesarán a partir de dicho año.
Tras todo el revuelo formado por la decisión, Luca de Meo ha explicado el motivo de ella. “Este es un tema muy emocional, incluso para mí. Soy un apasionado por la competición y he tenido que tomar decisión en contra de lo que siento. No se ha tomado a la ligera, sino que es resultado de largos meses de observación y estudio. Admiro el compromiso y la tenacidad de los trabajadores de Viry. Y estoy convencido de que lo mantendrán en los nuevos objetivos que serán asignados a la entidad. Siento profundamente ver a tanta gente decepcionada… pero esto es uno de los gajes de mi oficio. No puedo razonar como un fan”.
Uno de los motivos principales que ha llevado a De Meo a tomar esta decisión es porque el proyecto de Renault en la F1 está “en una pendiente descendente desde hace tres años. Los costes de desarrollo están creciendo de forma exponencial, mientras que el coste de un motor cliente es fijo, 20 millones por año. Todos los equipos tienen la sede donde construyen el chasis y la del motor cercanas, nosotros las tenemos en dos continentes, dos culturas diferentes”.
“En Enstone son muy independientes, están habituados a trabajar bajo diferentes colores… Así que, si hubiera tenido que reagruparlos, habría sido en Inglaterra”, comentó el empresario italiano. Por último, Luca de Meo recalca que ahora dentro del público de la Fórmula 1 “hay más jóvenes, más mujeres… por lo que es necesario una lectura diferente del deporte”.
