Los equipos de Fórmula 1 y la FIA están considerando agregar pegamento a las trampas de grava como una solución para hacer cumplir los límites de la pista sin dañar los neumáticos. En el circuito de Zandvoort, esta técnica se utilizó el año pasado para evitar que los monoplazas arrastrasen piedras hacia la pista, una medida que podría extenderse a otros circuitos.
Simone Berra, ingeniero jefe de Pirelli, se muestra a favor de la implementación. “Creemos que avanzar en la dirección de mejorar la trampa de grava es la dirección correcta para los límites de la pista. Es intentar usar una solución como la que tenemos en Zandvoort donde pegan la grava. Podría ser una posible introducción para el futuro porque no traes grava a la línea de carrera. De todos modos, sabemos que la FIA va a introducir trampas de grava más a menudo en el futuro porque están funcionando, honestamente, y tiene sentido”, dijo al medio RaceFans.net.
El director de deportes de motor de Pirelli, Mario Isola, señaló que se necesita encontrar la solución más apropiada para cada circuito, particularmente después de la experiencia en Catar el año pasado, donde los pilotos tuvieron que ser prevenidos de pasar por los bordillos que provocaban fallos en los neumáticos. “Obviamente, la grava tiene algunos pros y contras, y los bordillos también”. Sobre las grietas que se produjeron en Spielberg en el pasado Gran Premio, el italiano fue contundente. “Tuvimos algunos cortes en Austria. No fueron muy profundos, cortaban la banda de rodadura, pero no tocaban la construcción. Necesitamos mantenerlo monitoreado”.
Mencionó también que hay varios circuitos que albergan las competiciones de motos, lo que ha generado varias tensiones entre la FIM (Federación Internacional de Motociclismo) y la FIA. “No sé si existe una solución perfecta. Entiendo que la FIA tiene que trabajar junto con la FIM para encontrar una solución que sea común tanto para las carreras de coches como de motos. Tienen diferentes requisitos, tienen diferentes necesidades y, por lo tanto, a veces no es fácil”, explicaba.
La implementación de pegamento en las trampas de grava representa un esfuerzo continuo por parte de la FIA y los equipos de Fórmula 1 para mejorar la seguridad y eficacia de los circuitos. Mientras que la solución de Zandvoort parece prometedora, la diversidad de necesidades entre diferentes tipos de competencias, como las de motos y coches, añade complejidad al desafío. A medida que se avance en encontrar un equilibrio entre la seguridad y la funcionalidad, la colaboración entre la FIA y la FIM debe ser crucial.