El programa Dakar Future, que se lanzó en 2021, dará un paso más en la nueva edición con la nueva categoría llamada Mission 1000. Participarán once coches, en la que solo se permiten tres tipos de motor.
Con el paso de las ediciones emergen numerosos proyectos para llegar a la edición de 2030, momento en el que el Dakar se celebrará con un 100% de energías alternativas. El reto de la Mission 1000 sirve de trampolín para alcanzar este hito. En esta categoría, los participantes recorrerán unos 100 kilómetros al margen de la carrera general.
Se alcanzarán un total de 1.000 kilómetros a lo largo del Rally y validar así las opciones técnicas para su desarrollo en el futuro. Los 11 vehículos se presentarán en el Prólogo de AlUla. La categoría no será una competición como tal, pero se han definido una serie de objetivos para animar a los pilotos. Solo se puede competir con tres tipos de motor: 100% eléctrico, de hidrógeno o con tecnología híbrida.
El primer participante de la categoría es el francés Sylvain Espinaase a bordo de una moto eléctrica. Su primera participación fue en 2012 y sumó dos más en 2014 y 2016. El objetivo será el de llegar a la meta, como en sus anteriores participaciones. Todo junto al equipo italiano Tacita.
Oscar Polli es el siguiente en la lista, campeón del Mundo de Rally Raid en 2008 y ganador de la Africa Eco Race 2012. Debutó en el Dakar en 1997, aunque solo ha participado cuatro veces más. La última en 2022 como copiloto en el Dakar Classic. El italiano está dentro del equipo Tacita Discanto, con una moto eléctrica que tiene una autonomía de 300 kilómetros.
Willy Jobard no se pensó dos veces estar en la Mission 1000 de este Dakar 2024. El francés intentó terminar el Dakar con una máquina híbrida en 2010, lo volvió a intentar en 2021 con una moto propulsada por hidrógeno, pero una caída le obligó a abandonar. Jobard vuelve con una moto eléctrica que tiene autonomía suficiente para participar en un rally-raid “clásico”, dicen. Con la misma moto estarán Wenmin Su —participó en el Dakar en 2010 y 2011— y Gang Jun Cai, que hará su primera participación.
El primer español de la lista es Francisco José Gómez Pallas, con siete participaciones a sus espaldas, pero la primera desde 2018. Acude a Arabia Saudí con una moto artesana, 100% eléctrica, con el objetivo de alcanzar los 1.000 kilómetros de esta categoría y seguir desarrollando la montura para competir en el Dakar con el resto de motos.
“Desde mi último Dakar en 2018 llevo varios años trabajando en un proyecto novedoso, el de correr el Dakar en una moto eléctrica. Mi amigo Joan Puig creó un prototipo eléctrico 100% artesano, diseñado en base a geometrías de motos punteras del Dakar, incluyendo en ella una batería de unos 90 kilos. La moto tiene una entrega de potencia que jamás había visto en mi vida. Es increíble. Este proyecto me hace mucha ilusión porque abre un futuro nuevo y en favor del planeta”, comentaba Gómez Pallas antes de poner rumbo a Arabia Saudí, con el deseo de llegar a meta.
La pareja neerlandesa formada por Dick Zuurmond y Simon Koetsier irán con un coche propulsado con hidrógeno. Jamie Campbell y Bruno Jacomy llevarán un SSV, también propulsado por hidrógeno. Con otro SSV viajan Jean Michel Paulhe y Gauthier Gibert, dos empleados de Airbus que han creado un Can-Am con motor híbrido, es decir, un motor término y otro eléctrico. Hicieron el Rally de Marruecos y fueron decimoterceros en la categoría Open.
Camelia Liparoti es una leyenda del Dakar con 15 participaciones a sus espaldas. En 2019 consiguió un cuarto lugar en la categoría SSV, mientras que en los dos últimos años ha sido sexta y 35º en la categoría T3. Desde el 2010 hasta el 2017 ganó la clasificación femenina en quad. Para esta edición pilotará un SSV dentro de un proyecto británico-estadounidense de hidrógeno.
Y, por último, el proyecto más sonado entre los españoles. El KH7-Ecovergy Team se presenta con Jordi Juvanteny y José Luis Criado en un camión 100% propulsado por hidrógeno. Entre ellos acumulan 63 participaciones, casi nada. Por segundo año consecutivo volverán a equipar un sistema de propulsión mixto hidrógeno-diesel, que en su estreno en 2023 los llevó a hacer historia y convertirse en los primeros participantes en completar todo el recorrido de una edición del Dakar con este combustible.
Y se recompusieron del duro golpe que les dio la FIA a última hora, ya que les sacaron de la competición. En esta ocasión están dentro de Mission 1000 y nadie podrá sacarlos de aquí. Junto a ellos, estará Xavi Ribas, responsable del desarrollo del sistema a través de su empresa EVARM, que, por primera vez, disputará el Dakar y podrá recoger datos en tiempo real del funcionamiento y rendimiento del motor.