El equipo Red Bull sigue un año más escribiendo las páginas de la historia de la Fórmula 1. La escudería liderada por Christian Horner ha sido un auténtico ciclón en lo que llevamos de temporada de Fórmula 1. Nada parece indicar que Red Bull vaya a cambiar en lo que nos queda de año.
Max Verstappen ya tiene en su palmarés el título de campeón de este año y Red Bull el de constructores. El neerlandés sumó el pasado fin de semana en México su 16ª victoria del año y le dio al equipo la 18ª. Esta situación, que ya se ha convertido en habitual los domingos de carreras, llama la atención en una temporada en la que se supone que Red Bull tenía una penalización en el túnel de viento por superar el límite de costes.
En la carrera de México, el equipo de las bebidas energéticas cumplía un año desde que incumplió las normas de la F1. Esto supuso una multa para la escudería y una penalización en las horas de túnel de viento y desarrollo CFD que se vieron reducidas. Además, como vigentes campeones del mundo todavía redujeron más sus horas de desarrollo e investigación. Pese a la supuesta «desventaja», Red Bull ha seguido aumentando las diferencias con el resto este 2023.
Christian Horner ha hablado ante los medios sobre esto y ha comentado que aún no han sentido un gran impacto. «Ciertamente, todavía no se ha notado todo el impacto, porque obviamente ha comprometido la cantidad de desarrollo que hemos podido hacer este año», dijo Horner.
Pese a no poder desarrollar en exceso el coche de este año, la superioridad ha sido clara. Este hecho ha permitido que los vigentes campeones, hayan podido centrar sus esfuerzos en el coche del año que viene. «Afortunadamente, salimos con un coche muy fuerte a principios de año y hemos podido aplicar la mayor parte de ese tiempo de desarrollo, desde el principio de la temporada, al coche del año que viene. Con las restricciones del túnel de viento que hemos tenido, hemos optado por utilizarlo en el RB20, en lugar de continuar el desarrollo en el RB19″, añade.
En cuanto al límite de 2022, todos los equipos de la parrilla cumplieron con la regulación. Christan ha comentado que se ha evolucionado en la dirección correcta. «Es un conjunto muy complejo de regulaciones que ha evolucionado y el grado de escrutinio de este año fue fenomenal, en términos del rigor al que fue la FIA. Fue una colonoscopia completa la que experimentamos durante el verano. Y creo que la FIA también está aprendiendo».
Bruno Famin, jefe interino de Alpine, ha comentado que la Federación Internacional esta ayudando a los equipos a no cometer errores puesto que es muy sencillo equivocarse. «La FIA nos está ayudando a intentar dejarlo claro, al igual que nosotros intentamos ayudar a la FIA también a mejorar su proceso porque es tan complejo que es bastante fácil cometer un error en alguna parte o hacer una mala interpretación de lo que quieren», sentencia el francés.
