Robert Kubica consiguió volver a la Fórmula Uno tras un largo parón. Suerte quizás. La situación de Williams no era la mejor y mantener a Sergey Sirotkin no era lo ideal tras su fracaso en 2018.
Con un asiento libre y con George Russell de compañero, su ascenso a piloto titular estaba claro, ya que es un piloto que tiene más experiencia que el joven británico, que no lo está haciendo nada mal.
Si es verdad que estos Fórmula Uno son muy diferentes a los que pilotaba, más rápidos, más pesados. Con doce carreras disputadas, el polaco no se ha llegado a adaptar a pesar de que ha sumado el único punto para Williams.
Con muchas dudas y a punto de que arranque la recta final de la temporada 2019, aún no sabe lo que hará el año próximo. Muchos hablan de la Fórmula E, quizás más exigente por ser todo circuitos urbanos. También se habla del Campeonato de Resistencia.
“No sé lo que haré en 2020. Todavía no conozco ningún detalle. Hay planes, pero no todo depende de mí. Vamos a ver cómo va. La situación es igual cada año. Hay que tener paciencia”, dijo Kubica en un evento en Polonia según asegura SoyMotor.
Con su mano derecha muy debilitada, Kubica asegura que el inicio no ha sido fácil: “Creo que la situación en la que me encontraba hace tres años y la de ahora son completamente diferentes. El comienzo de la temporada fue muy duro y hubo muchos problemas, no sólo de rendimiento, sino también de otro tipo y creo que eso afectó al pilotaje y a los resultados”.
Por mucho que hayan trabajado en Grove, no se espera que Williams esté luchando por la zona de puntos, quizás si por la Q2, algo que si se ha visto esta temporada. Kubica tiene ocho carreras para convencer, pero no al mundo de la Fórmula Uno, sino a los equipos de otras categorías.
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