Antonio Fuoco será el elegido para reemplazar a Carlos Sainz en los Libres 1 de Abu Dabi a los mandos del SF-24. El italiano volverá a ponerse a los mandos de un Fórmula 1 más de seis años después, una recompensa por su gran trabajo en el simulador en los últimos años.
Esta decisión de Ferrari no es una simple recompensa para Fuoco. Se debe a que Oliver Bearman, al haber disputado ya tres carreras de Fórmula 1, ya no contabiliza como piloto joven. Este estatus es para los que han participado en dos o menos carreras. Por lo que en México, cuando se subió al SF-24 contaba, pero ya no.
La participación de Bearman en Brasil ha obligado a Ferrari a cambiar de planes, ya que todos los equipos deben subir a un piloto joven en dos sesiones de Libres 1. La mayoría de ellos eligen Abu Dabi y Ferrari será uno de ellos. Fuoco será quien reemplace a Sainz a los mandos del SF-24 en un regreso muy especial para él.
Fuoco ha sido uno de los pilotos más clásicos de Ferrari en los últimos años. El italiano, piloto de Fórmula 2 hasta 2018, siempre ha tenido un idilio especial con la Scuderia. Si bien su llegada al Gran Circo no estuvo sobre la mesa, ha ejercido diferentes roles como el de reserva y sobre todo, piloto de simulador.
Fuoco combina esos roles con el de piloto oficial de Ferrari en el WEC. Está a los mandos del coche número 50 con Nicklas Nielsen y Miguel Molina. El italiano y sus compañeros triunfaron en las 24 Horas de Le Mans este año y también se llevaron la Pole en el centenario de 2023. Él fue de hecho el encargado de clasificar el Hypercar.
Más de seis años después, Fuoco volverá a ponerse a los mandos de un Fórmula 1 en una sesión oficial. Su trabajo en el simulador, con valiosa información para carreras y test privados, ha sido recompensada por la Scuderia. El ‘timing’ de las sustituciones de Bearman le ha ayudado y podrá disfrutar de una hora de pruebas el viernes 6 de diciembre.