Renault ha anunciado un proyecto de transformación denominado Hypertech, que incluye el fin de la fabricación de las unidades de potencia para la Fórmula 1.
El actual programa de Alpine F1 está dividido en dos fábricas. En Enstone se produce el chasis, mientras que en Viry-Châtillon se crea el motor. Estos cambios confirman que la sede francesa no producirá unidades de potencia de Fórmula 1 una vez que termine la temporada 2025. La base ha diseñado y construido motores desde que la empresa matriz ingresó al deporte en 1970.
Enstone se convertirá, por lo tanto, en el centro de atención de Alpine dentro de la máxima categoría reina del automovilismo. Aún no se ha confirmado, pero se sabe que serán equipo cliente de Mercedes a partir de 2026. En un comunicado emitido este lunes, los franceses dicen que “el nuevo centro de ingeniería de vanguardia de la marca, reunirá a algunos de los mejores talentos del mundo para contribuir al desarrollo de vehículos de ultra altas prestaciones e innovaciones en tecnologías de vanguardia, para Alpine y el Grupo Renault”.
Hypertech Alpine se encargará del desarrollo de las baterías de los coches deportivos. También llevarán “a cabo actividades de investigación e ingeniería avanzada sobre tecnologías en colaboraciones con Ampere”. También se creará una “unidad de seguimiento de la F1”, con el objetivo de “mantener los conocimientos y las competencias de los empleados en este deporte y permanecer a la vanguardia de la innovación para los distintos proyectos de Hypertech Alpine”.
Los empleados de Viry-Châtillon se reunieron hace unas semanas con Luca de Meo, CEO del Grupo Renault, para convencerle de que seguir usando motores Renault era la opción más lógica y que serían más competitivos a partir de 2026. La reunión no ha servido para mucho, en definitiva. “La creación de este centro Hypertech Alpine es clave para la estrategia de desarrollo de Alpine y, más ampliamente, para la estrategia de innovación del Grupo”, defiende Philippe Krief, director general de Alpine.
