George Russell está en una posición difícil en la Silly Season de 2025, especialmente si Max Verstappen quiere ir a Mercedes. El británico acaba contrato la próxima temporada y con la llegada de Andrea Kimi Antonelli, su continuidad puede estar en peligro, como ya le ha ocurrido a Carlos Sainz en Ferrari este año.
Russell ha sido una de las grandes sensaciones en categorías inferiores y en Fórmula 1, ha reafirmado todo su potencial. Sin embargo, algunos errores cuando rodaba en cabeza, Canadá o Silverstone 2024 como ejemplos más recientes, despiertan algunas dudas sobre su figura. Su temporada está siendo increíble, ganando a Lewis Hamilton 11-4 en clasificación, aunque el heptacampeón tiene más puntos.
Por una razón o por otra, como ya pasó en 2022, el piloto más rápido de Mercedes está por detrás en el Mundial. Esto no es del agrado de Russell, y la próxima temporada tendrá un desafío muy distinto. Un debutante como Antonelli estará al otro lado del garaje y todo lo que no sea una superioridad clara podría dejar mal parado a George.
Russell, además, acabando contrato en 2025, necesita que tanto esta temporada como la siguiente sean las mejores. Es evidente que Antonelli no va a firmar para sólo un año y si Verstappen quiere irse a Mercedes para 2026, George se podría quedar sin sitio. Una situación similar a la de Sainz, después de que Hamilton haya querido acabar su carrera como piloto de Ferrari.
Russell puede ser el gran atractivo del mercado de pilotos de 2025, vista la complicada posición en la que está. Aunque brille, todo indica que su futuro en Mercedes podría depender sólo de los intereses de Verstappen, lo cual no es lo ideal en absoluto.
Toto Wolff además, en vez de ir a por un claro segundo piloto, como hiciera con Valtteri Bottas en su día tras la retirada de Nico Rosberg, ha hecho todo lo posible por fichar a Verstappen. Una maniobra que hace pensar que el austriaco duda de Russell como líder del equipo.
Wolff está ansioso por tener a Verstappen en el equipo y ese deseo no son buenas noticias para Russell, a quien el ‘timing’ no le va a ayudar en absoluto. Lo único que puede hacer él es mostrar su mejor cara en 2025, luchar por el Mundial y ganar carreras, para hacerle pensar a Toto que no necesita a Max en Mercedes. No es tarea fácil, pero a sus 27 años, George puede estar ante un momento clave de su trayectoria en Fórmula 1.
