Sting Ray Robb ya está de camino a Toronto, donde disputará la siguiente ronda de la IndyCar. La pasada semana, en Iowa, tuvo un accidente bastante feo tras volar durante varios metros y caer de manera brusca contra el asfalto. El piloto comenta cómo vivió todo.
Cuando cruzaron la meta los líderes, el piloto de AJ Foyt impactó con el Arrow McLaren de Alexander Rossi, despegando unos metros y cayendo bruscamente contra el suelo. Cuando los servicios de emergencia del circuito sacaron a Robb del coche, lo trasladaron a un hospital cercano para evaluar posibles lesiones, pero que en todo momento estaba “despierto, alerta y de buen humor”.
Pocas horas después, el piloto fue dado de alta. En una rueda de prensa ofrecida este martes, Robb comenta lo sucedido. “Al acelerar en las últimas vueltas, pude ver que Rossi estaba disminuyendo la velocidad. No sabía hasta qué punto. Miré hacia arriba al entrar en la curva 1 solo para ver dónde estaba. Creo que estaba aproximadamente a tres cuartas partes de la curva, pude ver la velocidad de cierre. Era muy, muy grande. Era enorme”.
“Es como el peor escenario posible, cuando sales de una curva a esa velocidad, con esa velocidad de cierre, sin saber lo que piensan o experimentan los demás conductores. Ojalá hubiera podido pulsar un botón de reinicio como en un simulador y empezar de nuevo. Estoy seguro de que él estaría pensando lo mismo. En ese accidente quedaron cuatro vehículos prácticamente destrozados. El hecho de que todos estemos sanos y salvos y preparados para ir a Toronto es bastante impresionante”, comentaba Robb, haciendo también alusión a la seguridad de estos coches.
A look at the multi-car incident on the final lap at @IowaSpeedway.
Alexander Rossi, Ed Carpenter and Kyle Kirkwood have been seen and released. pic.twitter.com/EWvkQFSbhZ
— NTT INDYCAR SERIES (@IndyCar) July 14, 2024
Y es que Ed Carpenter quedó encima del coche de Kyle Kirwood. Todo hay que decirlo y si no llega a existir el Aeroscreen, podríamos estar hablando de una desgracia porque la rueda del Ed Carpenter Racing estaba justo encima de la cabeza del piloto de Andretti. El impacto de Robb fue de 109G. “Me quedé sin aliento. Los cinturones cumplieron su función. Todo funcionó como debía. No tuve cortes ni nada anormal”.
“Tenía algunos moretones en las caderas por el funcionamiento de los cinturones. Cuando me sacaron del coche, me sentí mareado y me quedé inconsciente por no sé cuánto tiempo. Fue bastante rápido. Cuando recuperé la conciencia, pensé: ‘No me está yendo muy bien’. Me tumbaron inmediatamente en la camilla. Una vez que estuve en la camilla, me sentí muy bien. Veía con claridad. Me conectaron una vía intravenosa. Inmediatamente pude sentir que la energía regresaba”, explicaba Robb sobre su peor momento tras el choque.
Por suerte, Robb esta bien y, como comentábamos, estará en Toronto este fin de semana a bordo del AJ Foyt #41. Ahora bien, el equipo está trabajando duro para tener un nuevo chasis listo y competir en las calles de este circuito canadiense. “Tener la posibilidad de volver a subirme al coche el fin de semana, no lo hago desde un lugar de miedo, lo hago desde un lugar de gratitud y alegría por poder volver a conducir”.