Este fin de semana, la Fórmula 1 se desplazará al Hungaroring, una cita que ha estado en el calendario desde 1986. Las características del trazado húngaro son similares a las de Mónaco, por lo que es más que probable que veamos a los equipos utilizar configuraciones de monoplaza con alta carga aerodinámica, similar a las de Mónaco.
El Hungaroring es un circuito muy técnico y lleno de curvas, con un total de 14, seis a la izquierda y ocho a la derecha. Solo cuenta con una recta significativa, que es el único punto claro de adelantamiento. La pista tiene una longitud de 4.381 kilómetros, siendo una de las más cortas del calendario, y se correrán 70 vueltas.
El circuito dispone de dos zonas de DRS. Una en la recta principal y otra en la recta corta entre las curvas una y dos. Al tener solo un punto claro de adelantamiento, será muy difícil adelantar, algo característico de este circuito, por lo que la estrategia será un factor clave. Para esta carrera, Pirelli ha elegido la gama de neumáticos más blandas al igual que el año pasado: el C3, el C4 y el C5. La degradación de los neumáticos puede ser alta, especialmente en condiciones de calor extremo, lo que podría llevar a estrategias de dos paradas.
Max Verstappen ganó el año pasado en el Hungaroring con esta estrategia de dos paradas, predominando los compuestos medio y duro al inicio, aunque algunos pilotos, como Carlos Sainz, optaron por el blando para ganar posiciones rápidamente. Es clave buscar un equilibrio a la hora de hacer la vuelta rápida sobre todo en clasificación. Si los pilotos empujan demasiado en el primer sector, podrían perder mucho tiempo en el último sector porque los neumáticos se habrán desgastado y no tendrán agarre.
El año pasado vimos como muchos pilotos sacrificaban el primer sector para tener agarre en la última zona del circuito y no perder tanto tiempo. El trazado húngaro no se utiliza mucho a lo largo del año, es decir, hay pocas competiciones automovilísticas que compitan allí. Lo que significa que los niveles de agarre aumentarán significativamente a medida que la pista se engome durante el fin de semana. Esto podría resultar en una mejora continua en los tiempos de vuelta a medida que avanza el evento.
A pesar de ser un circuito donde adelantar es complicado, Hungría nos ha dejado grandes carreras en ocasiones anteriores, y este año podría ser una de esas. La competitividad entre los equipos punteros es alta, lo que permite que hasta tres equipos tengan posibilidades de ganar este GP, con la incógnita de si Ferrari seguirá en la lucha. Lewis Hamilton es el piloto más exitoso en este circuito con ocho victorias, y McLaren lidera entre los equipos con 11 triunfos.