En Imola trajeron un paquete de mejoras que resultó ser nefasto, lo que les llevó a volver a la especificación anterior en Silverstone después de varias carreras. Las mejoras en Imola buscaban añadir carga aerodinámica, pero el coche se volvió más inestable, afectando su equilibrio y rendimiento, lo que provocó que solo puntuaran en Canadá y Reino Unido. Este periodo técnico complicado reflejó problemas similares a los enfrentados el año pasado, cuando intentos de mejora aerodinámica también afectaron negativamente al coche.
Después de Silverstone viene Hungría, donde Fernando Alonso espera un «nuevo mundial» con las actuales modificaciones del equipo y con la intención de competir con los cuatro equipos punteros. Aston Martin tiene esperanzas de que las mejoras funcionen, algo que no lograron este año ni al final del año pasado.
Para evaluar estos nuevos cambios, Aston Martin realizó un Filming Day, una jornada en la que los equipos pueden rodar hasta un máximo de 200 kilómetros para probar nuevas piezas o ajustar el coche para los próximos GP. Nick Yelloly, piloto de simulador, estuvo al volante, lo que permitió recoger datos reales para compararlos. No es casualidad que el equipo británico haya realizado el Filming Day justo antes del GP de Hungría, cuando planean introducir las mejoras.
El coche que salió a pista no fue el mismo que vimos en Silverstone, sino el que llevará las mejoras para Hungría. Una de las actualizaciones ya probadas son los conductos laterales exteriores junto al Halo, diseñados para mejorar la estabilidad del monoplaza, similar al diseño de Ferrari que presentó a principios de año. Además, han trabajado en la parte más adelantada del fondo plano del coche. Una zona crucial para la aerodinámica debido a su impacto en el flujo y las turbulencias.
Otra mejora importante se centra en el fondo plano del monoplaza, una zona sensible y clave para la aerodinámica, ya que ahí se puede ganar o perder mucho tiempo por vuelta. También han introducido un nuevo alerón delantero, similar al de McLaren y Mercedes, con el plano principal más pronunciado y cerca del suelo, junto con ajustes en la aerodinámica de los conductos de freno traseros.
Regresar a la especificación anterior a Silverstone no se considera algo negativo, sino que puede ser positivo. Esto es posible porque permite a Aston Martin comparar las mejoras recientes con versiones anteriores del coche y así corregir cualquier error que haya surgido. Un ejemplo de cómo este aparente “retroceso” puede ser beneficioso, es una situación similar el año pasado, en carreras como las de Estados Unidos y México volvieron a la especificación anterior, y posteriormente en Brasil, Alonso logró volver al podio.