Seguimos con el primer triplete de la temporada 2024 de Fórmula 1 aterrizando en Spielberg, hogar del Gran Premio de Austria. Pirelli, suministrador oficial de neumáticos de la categoría, ha desvelado los compuestos que llevará a la cita austriaca.
A pesar de no ser un trazado con demasiadas curvas, el Red Bull Ring cuenta con un historial de mediana degradación. Por ello, la marca italiana ha decidido volver a la gama más blanda de compuestos para este fin de semana: C3 (duro), C4 (medio) y C5 (blando). Misma elección que en 2023, edición que ganó Max Verstappen, seguido de Charles Leclerc y Sergio Pérez.
Por un lado, nos encontramos con uno de los trazados más abrasivos del calendario. La superficie de los 4,318 kilómetros que componen al Red Bull Ring no ha sido asfaltada recientemente, por lo que esta se caracteriza por la rugosidad y un mayor desgaste de las gomas. Esto, unido a las altas temperaturas que suelen darse en estas fechas, hará sufrir con sus ruedas a muchos en carrera.
En cambio, el bajo número de curvas que componen el circuito facilitará la tarea a pilotos y equipos. Sus largas rectas también serán claves a la hora de enfriar los Pirelli. Es la propia proveedora quien estima estrategias de dos paradas para la cita dominical.
Por todo ello, Pirelli no destaca ninguna característica más allá del grado de abrasión del asfalto —calificado con un 4 sobre 5—. Mediciones como el estrés lateral o el agarre de la pista, a diferencia de las carreras anteriores, no jugarán un papel fundamental para este Gran Premio de Austria. Por su parte, las presiones se han fijado en 23.0 en las ruedas delanteras y 20.0 en las traseras.
El último factor a tener en cuenta para la cita austriaca es el regreso del formato Sprint. Con ello, volveremos a ver a muchos equipos reservarse todos los compuestos posibles en el primer segmento del fin de semana pensando en la clasificación y carrera tradicionales.
