La nueva reglamentación de cara a 2026 ha dejado a muchos descontentos. Ante la llegada de una mayor hibridación de unidades de potencia y elementos como la aerodinámica activa, son varios los detractores de esta nueva normativa.
Existen muchas preocupaciones por el difícil comportamiento de los monoplazas en el simulador. Pilotos y equipos comparten que, al menos en las primeras fases de desarrollo, se observan descompensaciones que podrían hacer de los nuevos F1 coches extremadamente frágiles.
Desde la FIA, según recoge RacongNews365.com, entienden las grandes inquietudes que hay en torno al nuevo reglamento. Pero creen que el tiempo y la evolución del concepto que se ha diseñado disiparán toda duda. “Creo que los temores son fundados porque la gente está tomando una instantánea de lo que es ahora la normativa en un trozo de papel. Está claro que esperamos mejorar el rendimiento. Por eso pusimos el listón razonablemente bajo al principio. Aumentar la carga aerodinámica de estos coches es bastante fácil, si tienes la libertad reglamentaria. Así que entiendo los comentarios. Se resolverá al cien por cien en los tramos finales”, comentó Nikolas Tombazis, director de monoplazas del órgano.
A pesar de las declaraciones del dirigente griego, la cuestión relativa a 2026 sigue en el aire. El concepto presentado no va a diferir mucho de lo que veamos ese año en pista. Por lo que varios de los problemas de inestabilidad y mal reparto de potencia que las escuderías comentaron pueden trasladarse a la realidad en esa temporada.
Aunque es razonable mencionar que la que se dio la semana pasada no es la versión oficial del reglamento. Esta se conocerá en diciembre de este año, por lo que aún está sujeta a varios cambios. “A principios de 2025, cuando los equipos puedan empezar el desarrollo aerodinámico, esperamos que se haga una cantidad razonable de trabajo extra“, cerró Tombazis.
