La temporada de Aston Martin se puede calificar, de momento, como decepcionante. A pesar de un inicio esperanzador, en el que se iban acercando poco a poco a los punteros, desde el Gran Premio de Miami el panorama parece otro.
Los británicos son los quintos en discordia, sin aparente ritmo para luchar con los equipos más fuertes y con RB o Alpine pisándoles los talones en rendimiento. Así lo reconoce Mike Krack, jefe de la escudería, quién tras acabar la carrera en Canadá confirmó que sus prestaciones siguen lejos de las esperadas.
“El año pasado, por estas fechas, dijisteis, ‘estáis muy por delante del plan’. Ahora estamos muy por detrás del plan. Creo que, si te alejas, tienes que ver realmente si hay progreso como equipo. El año pasado estábamos mejor de lo que pensábamos. En una trayectoria ascendente, subirás o bajarás dependiendo de lo que hagan tus competidores, pero hay que mantener el objetivo a la vista“, declaró a Motorsport.com.
Y es que las actualizaciones que llegaron al monoplaza en Imola no parecieron dar un gran rendimiento. De hecho, en aquella carrera ambos pilotos reportaron que el AMR24 era un coche más nervioso e impredecible. Pero Krack llama a la calma y al futuro que se avecina a partir de 2026, con la asociación de Aston Martin y Honda.
“En Imola, creo que algunos periodistas hicieron como primera pregunta eso de, ‘así que, ¿las actualizaciones no están funcionando?’, por lo que a veces juzgamos demasiado el rendimiento de un equipo o de una mejora. Tenemos un plan sobre cómo desarrollar el equipo desde el punto de vista de la infraestructura. Tenemos grandes socios que vienen con Honda y en Aramco. Creo que no hay razón para ser negativo“, cerró Krack.
Aunque aún quedan dos tercios de la campaña 2024, el optimismo no reina en Silverstone. Se ha dado un paso atrás respecto a 2023 y son conscientes de ello. Veremos cómo pueden evolucionar su monoplaza para volver a la lucha por los podios.
