Tras una gran carrera al sprint, con mucha acción en pista, la Formula 3 afrontaba la carrera principal del fin de semana con las expectativas muy altas.
La salida era muy limpia. Leonardo Fornaroli mantenía el liderato, mientras por detrás, Kevin Bedrin y Luke Browning se tocaban ligeramente, pero sin consecuencias. Por la parte de atrás, Tasanapol Inthraphuvasak sufría un toque con Tim Tramnitz y se salía de pista de pista en la segunda curva. Afortunadamente, el piloto de PHM AIX Racing logró reemprender la marcha, aunque con un pinchazo.
En la zona media de la parrilla, las batallas eran constantes y muy duras. Tanto, que en la curva 11, Tommy Smith y Joseph Loake sufrieron un toque que los dejaba fuera de carrera y provocaba la salida del coche de seguridad. En la segunda vuelta, Sophia Floersch tuvo que abandonar por problemas mecánicos en su coche.
La carrera se reanudaba en la vuelta seis. Fornaroli defendía bien el liderato, mientras la pelea estaba por la cuarta posición, ya que Bedrin perdía la posición con Browning y Arvid Lindblad. Tras el coche de seguridad la acción en pista era frenética, con un grupo muy compacto y peleas en todas partes. Oliver Goethe y Mari Boya peleaban por la séptima posición. En la octava vuelta, Noel Leon y Martinius Stenshorne sufrían un ligero toque en la penúltima curva del trazado que provocaba daños en el VAR.
Este alerón dañado provocaba un pinchazo en una de las ruedas de Santiago Ramos en la vuelta siguiente, que le obligaba a entrar en boxes. Llegado el ecuador de la carrera, le informaban a Dino Beganovic por radio que podía atacar y enseguida adelantaba a Gabriele Minì para hacerse con la segunda posición. El italiano de PREMA parecía sufrir en ritmo, pues una vuelta más tarde perdía la última posición del podio frente a Browning.
Por su parte, Lindblad también parecía tener problemas de neumáticos ya que caía hasta la octava posición. Tras pasar a Minì con facilidad, Beganovic conseguía superar a Fornaroli una vuelta más tarde, mientras Browning se acercaba con mucho ritmo. En esa misma vuelta, los Campos de Boya y Sebastián Montoya luchaban entre ellos y contra Bedrin por la quinta posición, en una batalla muy ajustada en la que el español lograba salir victorioso.
Sin embargo, Montoya, con más ritmo, superaba a Boya, como también hacía Charlie Wurz. A falta de dos vueltas para el final, Minì atacaba a Browning y volvía a entrar en posiciones de podio. El británico se veía sorprendido y no tenía capacidad de reacción. Finalmente, era Beganovic el que se llevaba la victoria por delante de Fornaroli y Minì. Boya terminaba en séptimo lugar, por detrás de Montoya.