Red Bull ha iniciado una investigación al jefe del equipo, Christian Horner, tras una acusación de otro empleado. Se mantiene la presunción de inocencia, pero, según informa De Telegraaf, las acusaciones son graves.
Este medio asegura que los rumores surgieron durante una carrera de esquí que tuvo lugar el pasado mes de enero en Kitzbühel. También estuvieron invitados otros jefes de equipo como Toto Wolff o Zak Brown. Se ha preguntado a Red Bull Austria sobre lo que está pasando dentro del equipo y la respuesta ha sido la siguiente.
“Después de conocer las recientes acusaciones, la compañía inició una investigación independiente. Esta investigación, que ya está en marcha, está a cargo de un abogado especializado externo. La compañía toma estos asuntos extremadamente en serio y la investigación se completará lo antes posible. Sería inapropiado hacer más comentarios en este momento”, comentan.
Oliver Mintzlaff, director general de Red Bull, estaría al tanto de esta investigación. Christian Horner ha sido preguntado por el medio neerlandés y se ha limitado a decir lo siguiente. «Niego completamente estas afirmaciones».
Según informa Bild, Horner habría mandado imágenes subidas de tono a una empleada del equipo. Además, Red Bull le ha pedido dimitir voluntariamente, pero el británico no ha accedido. por otro lado, Daily Mail informa que desde la muerte de Dietrich Mateschitz un núcleo importante del equipo ha querido quitar a Horner del poder y aseguran que «los abogados de Horner dicen que las acusaciones son difamación y tienen como objetivo quitarle el poder y llevar todo el control a Salzburgo».