A pesar de su ajetreada agenda, Gonzalo Gobert, ex director del Circuito Ricardo Tormo durante 12 años y último director del Gran Premio de Europa 2012 que se disputó en el circuito urbano de Valencia, se ha sentado a charlar con MotorTimeES sobre la futura nueva sede del Gran Premio de España, Madrid.
PREGUNTA. Antes de empezar la entrevista, ¿Cómo estás?
RESPUESTA. ¡Estupendamente! Aquí con historias, con líos y con cositas.
P. Bueno Gonzalo, para empezar, cuéntame un poco sobre el proceso que vives cuando te llaman para organizar el Gran Premio de Valencia en 2012.
R. Bueno, yo llevo más de 25 años en la industria del motorsport, siempre desde el punto de vista de la infraestructura. He tenido la suerte de trabajar tanto para circuitos públicos como privados, como el circuito del Puerto de Valencia, ya que yo fui su último director, con toda la complejidad que aquello incorporaba, porque había que montar y desmontar todo el circuito, ya que era un trazado urbano. Aquello fue complicado, era un momento difícil donde había falta de fondos, teníamos parte de la población en contra, casi todos los medios de comunicación en contra, incluso a los del Gobierno de entonces, dificultades económicas, asistencia de público descendente… en fin, tuvimos muchos problemas.
En aquel momento intentamos proponer una fórmula interesante que era la alternancia entre Barcelona y Valencia, pero no se consiguió. Pero bueno, por la parte de Valencia, de la mano del entonces presidente, Alberto Fabra, pues llevamos unas negociaciones con Bernie Ecclestone y se consiguió una rebaja del canon que se pedía. Además de una serie de cosas, entre ellas, la alternancia con Barcelona, que, fíjate, si fuese ahora, el escenario sería otro para la Fórmula 1. En este momento, la Fórmula 1 es más codiciada en el mundo, a lo mejor no se plantearía salir de un país donde tiene dos Grandes Premios consolidados, o sí… A partir de ahí, intentamos eso, pero no cuajó. Entonces, Valencia renunció a la Fórmula 1 y yo me centré más en el Ricardo Tormo.
P. ¿Cómo fue pasar del circuito de Valencia al Ricardo Tormo?
R. Era algo complejo, ya que no solo era el circuito, sino que también se dedicaba a la tecnificación, de hecho, tiene dos escuelas. La más famosa es “La Cuna de Campeones”, de donde han salido nueve campeones del mundo de motos, lo cual es una barbaridad. Ahora después de 12 años, 25 trabajando en motorsport y 12 años al frente del Ricardo Tormo, después de este Gran Premio exitoso a nivel de público y de todo, salí de mis responsabilidades con el ánimo de cumplir un nuevo rol, ayudando donde pueda ayudar.
P: Me has comentado que uno de los problemas del Gran Premio de Valencia de Fórmula 1 fue, sobre todo, el aspecto financiero. A las puertas de la llegada del Gran Premio de Madrid: ¿Cómo vendes un proyecto así a los posibles sponsors? Porque, claro, el Gran Premio de Madrid dice que va a ser cubierto con financiación privada.
R. Es muy difícil hacer rentable un Gran Premio, pero claro, un evento de estas características te genera una serie de externalidades que también tienes que tener en cuenta.
Yo me quedo con un estudio que nosotros hicimos de repercusión de un Gran Premio, en este caso, de MotoGP y daba que el gasto directo de los asistentes en la zona era de 40 millones de euros. Solo el IVA de eso son son millones de euros, es decir, tienes otras razones diferentes a la rentabilidad pura para poder apoyarte en una decisión así.
Tampoco sería muy taxativo con que el sector público no aportará nada, porque mira lo que pasó en Valencia. Si tu miras todos los Grandes Premios de Fórmula 1 y de MotoGP que se han organizado en España, muy pocas ediciones habrán salido rentables. Yo si fuese el sector público pues tampoco descartaría el poder ayudar financieramente en parte el poder ayudar, porque todas las administraciones públicas de España, en mayor o menor medida, lo hacen cuando se celebra un Gran Premio.
P. De primeras, ¿qué le parece el Gran Premio de Madrid?
R. Lo que yo le veo bueno a este Gran Premio de Madrid es que es un trazado urbano, que es hacia donde va la Fórmula 1 ahora mismo. Aparte de Mónaco y Singapur tenemos en Estados Unidos a Miami y a Las Vegas, además de Bakú… Se están llevando las carreras a la ciudad y claro, lo bueno de esto es que es mucho más fácil asistir, siendo más atractivo para el espectador.
Además, al hacerlo en IFEMA, donde parte de la inversión ya la puedes rentabilizar todo el año y además se aprovecha para la Fórmula 1, y donde, además, el circuito pasa por una zona menos densamente poblada, lo cual veo como otra virtud, porque no se molesta a los vecinos y además, solo utilizas 1,5 kilómetros de vía pública, el resto es propiedad privada. Todos estos factores hacen para mí que el Gran Premio sea atractivo.
P. ¿Piensa que el Gran Premio de Madrid va a ser rentable?
R. Ahora es imposible de decir. El primero, seguro que es rentable porque va a ser el efecto novedad y todo el mundo va a querer ir, pero a partir de ahí veremos. Dependerá de si es muy ruidoso o muy molesto, de que la visibilidad sea buena, de que el atractivo sea realmente bueno, de que la oferta de servicios que se le da a los fans sea adecuada al precio que se pide… No estoy hablando de que los precios deban de ser cortos, no. Los precios pueden ser exorbitantes, pero lo que des a cambio tiene que alcanzar ese nivel.
P. ¿Cuáles son los costes de albergar un Gran Premio de esta talla?
R. Estamos hablando de un evento donde los costes de producción son altos. Yo creo que serán un poco menores porque se usará gran parte de IFEMA, pero no te quita nadie esos costes de montaje, los gastos de los servicios médicos, comisarios, etc. En fin, una factura potente.
Las cifras para albergar actualmente un Gran Premio de Fórmula 1 son altas. Es un evento global que todo el mundo quiere, porque a parte de las Olimpiadas y el Mundial de fútbol, yo creo que este es el siguiente escalón. A lo mejor, la Champions League o ciertos eventos deportivos muy ‘top’, pero esto es el siguiente nivel y lo quiere todo el mundo.
Ahora mismo existe una burbuja de demanda y, claro, suben los precios. Es un producto caro y habrá que montar y desmontar ese circuito, y eso también cuesta dinero. Sino que le pregunten a los promotores de la Fórmula E, también españoles, los primos Alejandro Gar y Alberto Longo que saben lo que cuesta.
P. El mayor problema que se ha visto en las redes sociales para el aficionado es que si llega Madrid, se supone que debe de salir Barcelona, que es un circuito histórico. ¿Crees que pueden convivir ambos en un calendario de Fórmula 1 moderna?
R. Perfectamente. Hay otros países como Italia que tiene dos Grandes Premios. España es una potencia ahora mismo en motorsport. La RFEDA, comandada por Manuel Aviñó, está haciendo un trabajo bárbaro. El año pasado fue de récord en todo.
Alex Palou ganó en Estados Unidos, Carlos Sainz acaba de ganar el Dakar, Marta García ganó el año pasado la F1 Academy… Estamos hablando de un país puntero de verdad en el motorsport. Un país como España, con la tradición que tiene, perfectamente podría tener dos Grandes Premios.
¿Dónde está la bolita? Primero, la Fórmula 1 la quiere todo el mundo. Ya está en un rango de 24 carreras, subir eso mucho más es complicado y claro, para que entre uno tiene que salir alguno de los que hay. Veo más fuerte a Madrid, ya que la Fórmula 1 está apostando por esas carreras urbanas que conectan más con la filosofía empresarial moderna de la Fórmula 1.
Dicho esto, Barcelona es una gran ciudad, con una gran tradición automovilística muy potente. Ojalá España pueda mantener a los dos. Ojalá lo consiga porque eso sería que España mejora su foco de los deportes de motor en el mundo.
P. ¿Qué debería de hacer Barcelona para mantenerse en el calendario junto a Madrid?
R. Yo jugaría a hacer un concepto totalmente diferente. Si Madrid va a ser la carrera urbana por excelencia pues yo haría de Barcelona más concepto de circuito puro, más ‘racing’. Sobre todo, las separaría en el tiempo en el calendario. Seguirás teniendo tu parte VIP, que irá al circuito y dormirá en Barcelona, pero también otra parte más estilo “festival”.
P. Me has comentado antes que la Fórmula 1 moderna tiene ahora esa filosofía empresarial de llevar las carreras a la ciudad, lo que hace que se pierdan circuitos históricos. En este 2024, de 24 carreras, ocho serán en circuitos urbanos o semi urbanos. ¿Cuál crees que puede ser el equilibrio óptimo?
R. He visto carreras aburridísimas en circuitos convencionales y he visto carreras apasionantes en circuitos urbanos. Dejando aparte Mónaco que prácticamente no es una carrera y que todos sabemos con las reglas que juega, pero yo me acuerdo de una carrera que vi en Bakú que fue apasionante. Porque Bakú mezcla una recta enorme con una zona revirada en el casco antiguo y eso hace que pasen cosas.
Al final, el aficionado, además de comparar ritmos de carrera o estrategias, quiere ver acción, y eso es muy americano. Siempre se dijo que en la Indy, si no pasaba nada, tiraban un gato para poder sacar el Pace Car y volver a reagrupar. No hay que olvidar que quienes han comprado la Fórmula 1 son los americanos, y ahí está la bolita.
A nivel comercial, es mucho más fácil y cómodo e incluso más justificable para la gente que tenga dinero y que quiera visitar la ciudad. Incluso ir un rato a ver la carrera y luego irse a visitar la ciudad, en vez de coger el coche, ir al circuito e irte de excursión.
P. Tras el éxito del Ricardo Tormo en MotoGP bajo su gestión, quería preguntarle sobre qué debe de hacer un Gran Premio para permanecer mucho tiempo en un calendario?
R: El Ricardo Tormo cumple, para mí, ciertas premisas. Lo primero, el diseño con forma de estadio que permite ver la carrera perfectamente. Lo segundo, el clima suele ser benigno, por lo tanto, la gente viene al Gran Premio y viene en la que es mi opinión, en la mejor parte del año, que es en otoño. También es clave la calidad del producto que se ofrece. Esa era mi obsesión tanto para mi como para mi equipo directivo, dar calidad. La cuarta pata es brindar un producto interesante. Nosotros en el Ricardo Tormo, en los últimos 10 años hemos tenido seis llenos y el resto con un 95% de aforo completo.
P. El aficionado llega y solo ve la carrera en sí, pero, ¿qué hay detrás?
R. Dos patas: ahí tienes al promotor y al organizador. Primera ventaja, tanto MotoGP como Fórmula 1, cuentan con un staff muy cualificado y experimentado que saben hacer su trabajo, lo cual ayuda a que las cosas salgan bien. En los circuitos pasa lo mismo. Se tiene un personal muy experimentado y, en ese sentido, hace que todo sea mucho más fácil. Además, todos los años repites una estructura parecida, a pesar de que puedes introducir novedades, está todo bastante estandarizado. Hay que tener en cuenta que toda la parte de producción televisiva va completamente aparte de lo que te he dicho. Lo hacen empresas especializadas, por tanto, te olvidas de esa parte.
P: Ya para terminar, quería hacerte una última pregunta. ¿Qué no tiene que hacer Madrid para convertirse en Valencia?
R. Para mí, el pecado original estuvo en decir que no vas a poner ni un euro de dinero público y luego ponerlo. No pasa nada nada por ponerlo porque, como dije antes, todas las administraciones públicas en España ponen dinero para apoyar sus Grandes Premios, eso, por un lado.
Luego es importante separar bien lo que es público de lo que es privado. Si el evento es privado, tú ayudas desde el sector público como sea y si el evento se organiza mediante un circuito o una empresa pública, pues que desde el principio sea así.
Esto no es nada que no sea habitual en España. Desde unas olimpiadas que se hicieron o la Expo, que seguro que también tuvo un promotor, hasta una Copa América que antes se hacía en Valencia y ahora se hace en Barcelona, pasando por las carreras de MotoGP y Fórmula 1 que se han organizado en España y demás eventos.
