Red Bull ha vuelto a alardear de sus triunfos. Christian Horner ha admitido que el RB19 posee más del 60% de las piezas que tenía su antecesor.
De aquí, se pueden hacer dos lecturas diferentes. La primera es que el trabajo de desarrollo por parte de Red Bull es extraordinario o la segunda, que deja al resto de equipos en un lugar ridículo. Muchos, como Mercedes o Ferrari, cambiaron su diseño para el 2023, mientras que los austriacos apostaban por las piezas del 2022. Gran parte del chasis, la suspensión y la caja de cambios pasaron del RB18 al RB19.
En 2022, Red Bull ya dominó la segunda parte de la temporada cuando Ferrari no paraba de acumular errores, además de que el monoplaza bajó en prestaciones, y Charles Leclerc se quedó sin opciones. Nadie pensaba lo que estaría por llegar, 21 victorias y batiendo récords cada fin de semana.
“Hay muchas cosas que traspasaron del RB18, parte del chasis, de la suspensión son iguales, la caja de cambios también es exactamente igual. Probablemente, el 60% del coche corrió el año pasado también”, comentaba Horner, jefe del equipo Red Bull, en una entrevista para Sky Sports.
A pesar de lo que se ha visto durante el año, el equipo sabe que el monoplaza puede ser aún mejor en algunos aspectos. “Hay áreas en las que podemos mejorar y las llevaremos al RB20, así es la competición, siempre estás en busca de pequeñas ganancias. Estamos muy orgullosos de los récords que hemos batido, seguimos siendo un equipo joven, no tenemos ni 20 años aún. Ya hemos ganado 13 títulos, 113 carreras, todas esas estadísticas tienen mucho valor para nosotros”.
Los dos títulos Mundiales, el subcampeonato de Sergio Pérez, que significaba el primer doblete de la historia de Red Bull, pero todo se empañó con la derrota en Singapur. “Fue un recordatorio de humildad de que no es tan fácil y de que tenemos rivales increíblemente duros que quieren ganarnos y vernos caer. Es esa motivación la que nos lleva a seguir así, la sensación de victoria es increíble y no queremos que se pierda”, cerraba Horner.
