El pasado Gran Premio de Catar fue muy duro para los pilotos. Las altas temperaturas y la larga exposición a fuerzas ‘G’ laterales durante toda la carrera hizo que muchos pilotos acabaran exhaustos e incluso mareados o con síntomas de deshidratación.
Este asunto de las altas temperaturas sufridas dentro del cockpit, se hablará en la próxima reunión del TAC (Comité Técnico), donde se reúnen los directores técnicos de todos los equipos y la FIA, junto al jefe técnico de la Formula 1, Pat Symonds. La próxima reunión se realizará el 31 de octubre, aunque la FIA ya ha prometido analizar lo ocurrido en Catar.
Autosport.com habló con algunos de los implicados, como Symonds.“Hablaremos sobre este asunto en el próximo TAC. La FIA está haciendo investigación sobre esto y yo por mi parte también. No es algo de una sola dirección. En la IndyCar tienen ventilación en diferentes lugares. Sus trajes son geniales, que pesan un par de kilos. Sin embargo, hay que sopesar la diferencia de rendimiento frente al aumento de peso».
Los equipos por su parte, apoyan los recursos destinados a solucionar esta situación. Así lo reconocía Zak Brown. “Los equipos y pilotos tendrán diferentes puntos de vista sobre diferentes temas. Pero cuando hablamos de seguridad, todos estamos alineados. Reuniremos a toda la gente para encontrar una solución. Todos han reconocido que no era una situación muy buena. Haremos que todo el personal adecuado trabaje para decidir una solución».
Mike Krack, director de Aston Martin, también se ha solidarizado con los pilotos. “La GPDA y la FIA están en discusiones, así que veremos qué pasa en las próximas semanas. En otras categorías hay distintos dispositivos, así que seguramente debamos reunirnos con las partes involucradas y llegar a una conclusión. Los pilotos se tienen que sentir cómodos para poder extraer el máximo».
Otros, como Toto Wolff, han sido precavidos ante una solución que impacte en el coche. “En Catar los pilotos vivieron la situación más extrema en calor que yo haya visto hasta ahora. Es necesario que puedan entrenar este tipo de situaciones. Debemos encontrar una solución con la FIA y los equipos sin tener que modificar en gran medida los coches. Esto podría afectar a los reglamentos técnicos».