Max Verstappen logra la primera pole de la temporada en el circuito de Baréin tras una clasificación muy apretada en la que han aparecido los Ferrari, Mercedes y Fernando Alonso para tratar de quedarse con las primeras filas de la parrilla de mañana.
El doble campeón mundial sorteó sin problemas tanto la Q1 como la Q2 para llegar a la tercera fase de la clasificación de Baréin con dos intentos para marcar vuelta y pelear por la pole position. Por un momento parecía que Checo Pérez podía levantársela, pero finalmente cayó de su lado.
El neerlandés se ha mostrado contento y satisfecho con su resultado. “El comienzo ha sido algo complicado ya que durante los test me ha costado encontrar el ritmo, pero estoy muy contento con la pole y sobre todo muy agradecido con el equipo, que ha logrado mantenerse arriba a pesar de la gran mejoría que han tenido el resto de escuderías», ha afirmado al bajarse del coche.
“El coche se siente más cómodo que el año pasado. Seguimos siendo los mejores y eso es fantástico, pero también me gusta ver como la parrilla se ha igualado más de un año para otro”, afirmaba tras la qualy.
El piloto también bromeaba cuando le preguntaban si su familia le estaba viendo por televisión, pues hoy es el cumpleaños de su padre Jos Verstappen: «Estoy seguro de que mi padre estará nervioso viéndome desde mi casa».
Verstappen peleará mañana para ganar aguantando las embestidas de su compañero de equipo y de los dos Ferrari, de tal forma que pueda afrontar el resto del campeonato con un equipo más confiado en sus posibilidades reales. Mañana, a partir de las 16:00, sabremos quién es el ganador de la primera carrera de la temporada y, muy probablemente, cuáles pueden ser los principales contendientes al campeonato.
