El jefe de equipo de Aston Martin, Mike Krack, fija como objetivo para 2023 dar un paso hacia delante y luchar por ser los mejores de la zona media. El alemán cree que pueden estar en la batalla con McLaren y Alpine y recuerda que para la próxima temporada tendrán mucho margen de mejora.
Aston Martin ha ido de menos a más en 2022, pero pese a ello, no ha podido pasar del séptimo puesto en el Mundial. El potencial de los de Silverstone es mucho más alto y lo quieren demostrar el año que viene. Por ende, tienen la meta de plantar cara a McLaren y Alpine en la lucha por ser los mejores de la zona media.
“Hemos acabado séptimos este año y debería ser mejor en 2023, necesitamos dar un paso al frente. No quiero ser demasiado optimista diciendo que queremos estar arriba la próxima temporada, es excesivamente ambicioso y bastante poco realista. Eso sí, queremos mejorar y creo que con la llegada de Fernando, lo podemos hacer”, ha comentado Krack.
“Hemos visto una batalla por la cuarta posición del Campeonato de Constructores este año entre Alpine y McLaren. Si nos metemos en esa lucha, ya podemos considerarlo un paso al frente. Durante esta temporada, ya hemos mejorado considerablemente y queremos seguir en esa línea”.
Por otro lado, descarta que Lance Stroll vaya a tener un trato favorable por ser el hijo del propietario. Krack remarca que el canadiense es un piloto más y tiene una forma de trabajar muy parecida al resto y además, las diferencias se marcan en la pista y no en los despachos.
“El desafío no es más grande con Lance que con cualquier otro piloto. Es alguien que trabaja con sus ingenieros, les ayuda y viceversa, antes de evaluar toda la información, no hay nada diferente aquí. Algunas veces, en carrera, los pilotos tienen dos estrategias distintas y uno puede marcar la diferencia en el Mundial. Sin embargo, es necesario hablar con ellos en profundidad cada fin de semana”, ha finalizado.
