En esta cabecera queremos recuperar una sección de antaño: El Muro de MotorTime. En esta ocasión recordamos el Gran Premio de Australia de 1989 que se disputó tal día como hoy, un 5 de noviembre.
Fue la decimosexta y última carrera de la temporada, un Mundial que fue para Alain Prost y McLaren-Honda. La carrera estuvo marcada por la lluvia. Solo ocho pilotos cruzaron la línea de meta después de 70 vueltas de las 80 que estaban programadas en el circuito de Adelaida, ya que se alcanzó el límite de tiempo de dos horas.
Este Gran Premio fue el siguiente capítulo tras el toque entre Prost y Ayrton Senna en la última chicane de Japón. Posteriormente, el brasileño cortó la curva y fue descalificado, por lo tanto, se confirmaba la triple corona para el francés. Senna quiso boicotear el Gran Premio de Australia y abandonar la Fórmula 1, pero tras largas conversaciones con su familia y Ron Dennis, se presentó en Adelaida.
Entrando en el Gran Premio, Senna consiguió la pole ante su compañero de equipo, Prost. A poco más de una décima se quedó Pierluigi Martini. Ferrari no estaba pasando por su mejor momento con Niguel Mansell en séptimo lugar y Gerhard Berger decimocuarto. Un Ferrari 640 que tan solo consiguió tres victorias, aunque acumuló 19 retiradas. El español Luis Pérez-Sala no consiguió la clasificación para la carrera en su Minardi – Ford.
La lluvia complicó el Gran Premio
El día de la carrera amaneció nublado, con pronóstico de lluvia para la tarde. En el calentamiento matutino ya llegó la lluvia, por lo que la FIA organizó una sesión extra de 30 minutos para preparar el coche. Muchos pilotos se salieron de pista en esta media hora por culpa del aquaplaning, algunos en su vuelta de salida como Prost y Berger. También Senna sufrió un trompo.
Otros pilotos como Prost y Berger, junto con Nelson Piquet, Thierry Boutsen, Riccardo Patrese y Alessandro Nannini discutían la posibilidad de cancelar la carrera por motivos de seguridad o incluso retrasar el inicio, ya que se esperaba que la lluvia desapareciera en un par de horas. A 60 minutos para comenzar la carrera, la lluvia empezó a caer con más fuerza y gran parte de la parrilla consideraba esa suspensión.
Los argumentos de los pilotos no fueron suficientes y las luces se apagaron para dar inicio al Gran Premio. Prost superó a Senna en la salida, pero el brasileño frenó tarde en la primera curva y recuperó su posición. Olivier Grouillard hizo un trompo en la curva cuatro y varios pilotos cometieron errores. JJ Lehto tuvo un accidente que bloqueó la pista y se desplegó la bandera roja.
Prost decidió retirarse de la carrera por motivos de seguridad y criticó a los organizadores de la prueba por no cancelar la carrera. Se sabía que el francés no era un amante de las carreras sobre mojado. En la segunda salida, Martini se puso a la altura de Senna tras al abandono de Prost. De todos modos, el de McLaren ganó una ventaja de nueve segundos la no tener a nadie delante, mientras que los demás sufrían por una visibilidad nula.
Martini no pudo aguantar la segunda posición mucho tiempo y fue superado por Williams y Nannini. El siguiente retiro fue el de Arnoux tras un toque con Eddie Cheever. El de Ligier – Ford confiaba en una buena carrera al conseguir el mejor tiempo en la sesión extra por delante de Senna. El acelerador de Derek Warwick se quedó atascado e impactó contra las protecciones. Tuvo mucha suerte, ya que una de sus ruedas estuvo a punto de impactar contra su cabeza.
En apenas dos vueltas, seis coches se retiraron. Los dos Dallara cometieron un error, mientras que Mansell, Alessandro Nannini, Nelson Piquet y Cheeveer se salieron de mista. Otro de los accidentes más gordos lo protagonizó Senna al chocar con la parte trasera del Brabham de Martin Brundle. Cinco vueltas más tarde, Piquet chocó con Percarlo Ghinzani al perder el punto de frenado. El tres veces Campeón del Mundo fue golpeado por ambas ruedas traseras del Osella – Ford. Por suerte, no sufrió lesiones.
La carrera llegó a su fin tras las 70 vueltas por límite de tiempo. Thierry Boutsen ganó la segunda carrera de la temporada, también mojado. Nanini acabó segundo y Patrese tuvo que defender el último puesto del podio con Satoru Nakajima, quien consiguió la vuelta rápida y su mejor resultado en Fórmula 1. Además, fue felicitado por pilotos que le habían criticado anteriormente, como James Hunt. En conclusión, solo ocho pilotos vieron la bandera de cuadros.
Fue la última carrera para René Arnoux, Eddie Cheever, Piercarlo Ghinzani y Jonathan Palmer, aunque este último no se clasificó. Los equipos alemanes, Zakspeed y Rial también dijeron adiós al Gran Circo.