Desde la tercera posición en parrilla, Lewis Hamilton empezaba un Gran Premio con hambre de victoria. En la salida superó a su compañero de equipo, aunque para atacar a Max Verstappen tenía que intentar otra estrategia.
Por eso comenzó con goma media, pero en la salida los neumáticos rojos tuvieron ventaja. En el primer stint, el británico se mantuvo en una distancia de dos segundos respecto a Verstappen, pero no fue suficiente. Cuando se pensaba que Mercedes montaría goma blanda en su parada, fueron a los duros para llegar al final de la carrera.
Desde el muro insistían al siete veces Campeón del Mundo que la goma media iba a desfallecer, pero no ha sido así. “He estado muy cerca, sobre todo en la primera tanda, los Red Bull eran más rápidos, quizá han tenido una mejor estrategia de neumáticos”, comentaba para los micrófonos de la Fórmula 1.
Es difícil saber que hubiera pasado si Mercedes llega a empezar con los blandos, pero el ritmo estaba ahí. “No estoy seguro de que lo hubiera pasado. Pensaba que teníamos que haber empezado con blando, pero empezamos con el contrario. La primera tanda no estuvo mal, pero el neumático duro no ha funcionado. Enhorabuena a Max, es bueno estar aquí y separar a los Red Bull”, continuaba el británico sobre la carrera.
Hamilton cree que, al menos uno de los coches alemanes debería haber empezado con goma blanda. “Uno de nosotros debería haber empezado con los blandos y al final eso ha sido más lento. Era nuestra oportunidad para apostar por uno de nosotros, aunque es una victoria para nosotros por cómo ha sido el año”.
Después de un fin de semana lleno de polémicas, el británico lanzó un mensaje a los aficionados mexicanos. “Antes de nada, estos han ido unos fans increíbles. Sin duda, un poco raro esta vez porque me han estado abucheando todo el día, pero me encanta México y su gente”, concluía, pero quizás era una forma de alentar al piloto de casa, Sergio Pérez.