El día amanecía con una baja amenaza de lluvia. La carrera se preveía en seco. Zak O’Sullivan, con una sorprendente pole con su Carlin, debía defender la primera posición frente a Arthur Leclerc. El monegasco, quinto en el campeonato, tenía la oportunidad de dar un golpe en la mesa de cara a la clasificación de pilotos.
O’Sullivan salía lo suficiente bien para defenderse del ataque de Leclerc. Los dos primeros se respetaban. Sin embargo, la batalla por el tercer puesto estaba más que servida. Hasta tres pilotos luchaban por el último peldaño del podio. Bearman, Maloney y Crawford se intercambiaban posiciones. Sin embargo, en la última curva de la primera vuelta, Maloney dejaba sin espacio a Bearman, y al volver a la pista, el de Prema tocaba ligeramente al Trident que se iba a la grava.
No había pasado ni una vuelta cuando Colapinto se quedaba a un lado del asfalto, mientras Correa entraba en boxes, con la intención de abandonar. Esto hacía salir el Safety Car justo cuando Leclerc realizaba un adelantamiento a O’Sullivan en Stowe. Sin embargo, debía devolver la posición al de Carlin.
Se iba el SC en la tercera vuelta. O’Sullivan aceleraba muy pronto y sorprendía a Leclerc. Por detrás, Isack Hadjar demostraba un gran nivel, y enseguida se ponía en el top 5. Llegó la vuelta seis, y con la activación de DRS, Leclerc, con un ritmo endiablado, lograba adelantar a O’Sullivan y ponerse líder.
Por detrás, Pepe Martí demostraba un grandísimo ritmo y una buena remontada. En tan solo siete vueltas era decimoctavo. En la vuelta 11, Villagómez sufría un accidente en Copse por un toque con Azman. El piloto salía por su propio pie y se desplegaba el Safety Car de nuevo.
En la vuelta 14, el coche de seguridad se iba. Leclerc, muy astuto, replicaba la estrategia de O’Sullivan con el primer SC y aceleraba prontísimo, sacando mucha ventaja frente al segundo. Martins, por su lado, empezaba su propia remontada y se marcaba un gran adelantamiento contra Frederick.
A falta de varias vueltas para el final, Bearman subía el ritmo y se acercaba a Collet. Ni una vuelta tardó en adelantarlo y ponerse en persecución de O’Sullivan. El de prema y Carlin mantenían una lucha preciosa hasta la línea de meta. Sin embargo, Zak conseguía la segunda posición.
Finalmente, Leclerc lograba una incontestable victoria, seguido de O’Sullivan y Bearman. Por detrás, Vidales, conseguía ser noveno y Pepe Martí sufría algún problema en la última vuelta que lo relegaba a las últimas posiciones.