El español salía desde la sexta posición de la parrilla y ha finalizado en la octava. Aunque sumando puntos para el equipo junto a Esteban Ocon, la carrera se ha hecho muy cuesta arriba.
“Cada punto cuesta. Este año una carrera que salíamos en una buena posición nos ha costado sumar puntos. El octavo bien, después de mucha lucha, una parada sabíamos que iba a ser complicada y al límite y así ha sido. Y esta última la final la verdad es que trajo bastante estrés cuando no lo necesitábamos, pero contento”, comenzaba Alonso para DAZN.
Durante la salida el asturiano ha estado forzado por su compañero Ocon, quien le ha cerrado la puerta totalmente. Además, el uso de los neumáticos duros no le ha beneficiado con el ritmo de carrera. Una vez se ha hecho con ellos ha ido luchando por subir posiciones, aunque le ha resultado muy difícil.
“La verdad es que he tenido que levantar en la curva uno como en la dos y luego en la cinco, sobre todo. Y he ido por fuera de él y fue bastante agresivo en esa primera vuelta. Pero bueno levanté y así no nos tocamos y al final me dejo pasar y acabamos octavo y noveno. Lo importante para el equipo es estar cerca de McLaren y hoy hemos sumado los mismos puntos que ellos en una carrera bastante complicada. Ha sido positivo”, explicaba el piloto de Alpine.
Tras la carrera en Hungría se llevan los mismos puntos que McLaren, principales rivales en el campeonato, por lo que está contento con el resultado. Después de tantas carreras seguidas, ahora toca disfrutar del descanso. “Llevamos un julio intenso con cuatro carreras en cinco fines de semana, así que a descansar un poco. El equipo también, los mecánicos. Al final nosotros venimos de jueves a domingo, pero la gente que monta y desmonta el garaje se merecen un poco de descanso”, finalizaba Alonso.