Debido a la invasión de Rusia a Ucrania, Haas decidió poner fin a su relación con Uralkali. Como consecuencia, Nikita Mazepin también tuvo que dejar libre su asiento. Su sustito fue Kevin Magnussen, quien ha mejorado el rendimiento del equipo.
El ruso no se imaginaba que iba a perder su asiento de Fórmula 1, al igual que Magnussen recuperarlo. “Creo que si alguien le hubiera preguntado a Kevin a fines de febrero si conduciría un coche de F1 una semana después, ciertamente habría dicho ‘no’”, comentaba el ruso para la cadena de televisión Match TV.
Mazepin espera que en algún momento vuelva a tener la oportunidad de estar en la Fórmula 1. De momento, mientras que Rusia sigue declarando la guerra a Ucrania, es improbable. Después, seguramente también, pero veremos. Se compara con Magnussen, quien estuvo fuera del Gran Circo un año, asegurando que podría volver en forma también.
“Hace cuatro meses no podía imaginar que el mundo cambiaría tanto. Ahora no puedo imaginar que volverá a la normalidad en cuatro meses, pero eso espero. Magnussen también está en buena forma después de un parón. Ha demostrado su valía y tengo la intención de hacer exactamente lo mismo y repetir su historia de éxito”, comentaba.
El expiloto de Haas F1 no ha recibido mensajes de ninguno de los compañeros con los que trabajo la temporada pasada. “¿Por qué nadie me ha enviado nada? No lo sé, pero si un mecánico o alguien con quien he trabajado muy de cerca resulta superfluo, también le enviaría un mensaje por WhatsApp. No importa cuál sea la situación entre nosotros o la gerencia”.
Antes de acabar su intervención habló de Mick Schumacher, quien fuera su compañero en la escudería americana. No está teniendo un gran año, siempre por detrás de Magnussen y Nikita solo se limita a decir lo siguiente: “Solo digo que los resultados hablan por sí mismos, eso es todo lo que diré”.
