Haas prefirió no reparar el coche de Mick Schumacher para el Gran Premio de Arabia Saudí, después de que el alemán fuera declarado apto para correr, y preparar un VF-22 de cara al Gran Premio de Australia.
Guenther Steiner no ha querido cargar a sus mecánicos preparando un coche nuevo para este domingo. La probabilidad de llegar a los puntos es muy baja, ya que Mick hubiera salido desde el Pit-Lane, además del riesgo de sufrir más daños. Se ha preferido pensar en el Gran Premio de Australia, que tendrá lugar dentro de dos semanas.
“Podrías trabajar toda la noche y luego en la mañana de la carrera darte cuenta de que te has comprometido tanto porque hiciste todo a toda prisa. Si luego sucede una pequeña cosa en Australia, te quedas sin pieza. No tiene sentido para mí”, comentaba el jefe de Haas según recoge Autosport.com.
Otra de las razones para no sacar a Schumacher a pista es que, el material se enviará directamente a Melbourne. “No podemos enviarlo al Reino Unido ahora para hacer todas las cosas en el coche que necesita, para verificar grietas y todas esas otras cosas. Si no corremos aquí, estaremos al 100% en Australia”.
Schumacher sufrió un fuerte accidente durante la clasificación del Gran Premio de Arabia Saudí. El impacto contra las protecciones dejó el VF-22 realmente destrozado. Los comisarios, al retirarlo del trazado, vieron como la caja de cambios se desenganchaba del resto del chasis.
El piloto fue atendido por los médicos de la FIA dentro del monoplaza, para luego ser trasladado al centro médico. Se le hicieron una serie de chequeos, pero fue trasladado al hospital. Durante la noche, Schumacher recibió el alta y ha dormido en su hotel. Kevin Magnussen saldrá desde la décima posición, por lo que los americanos pueden sumar por segunda carrera consecutiva.
