Max Verstappen se coronó en el Gran Premio de los Países Bajos, su carrera de ‘casa’. El piloto de Red Bull dominó durante todo el fin de semana y en carrera impuso su ritmo para ganar sin rivales.
El circuito de Zandvoort no ofreció demasiado espectáculo en cuanto a adelantamientos, tampoco hubo coche de seguridad ni bandera roja como se esperaba, pero la carrera también tuvo un punto de emoción. Los Mercedes no acertaron con la estrategia, Pierre Gasly sorprendió con su cuarto puesto y Fernando Alonso se sacó un fantástico ritmo del bolsillo para ser sexto.
La estrella: Max Verstappen
Verstappen hizo su trabajo en Zandvoort para recuperar el liderato del Mundial. El de Países Bajos corría en casa y tenía una gran oportunidad ante sí para sumar 25 puntos más, ganar a Lewis Hamilton ante sus fans y, sobre todo, volver a ponerse líder del Mundial.
Así lo hizo. Durante el fin de semana ha sido rápido y ha impuesto su ritmo. El sábado se llevó una ajustada Pole, pues solo fue 38 milésimas más rápido que Hamilton, aunque no le funcionó como debía el DRS. El domingo salió bien y no tardó en abrir hueco con Hamilton. Así, cruzó la línea de meta en primera posición ante la euforia de la ‘orange army’.
El estrellado: Mercedes y la estrategia
Verstappen cruzó la línea de meta con 20 segundos de distancia sobre Hamilton. Una de las claves de su derrota fue la estrategia. Primero, alargaron al máximo la parada de Valtteri Bottas para que frenara a Max lo máximo posible, pero Verstappen no dudó y no tardó en adelantarle.
Después, optaron por montar ponerle neumáticos medios a Hamilton. El propio piloto británico afirmó por radio que no era la mejor opción y los duros que llevaba Verstappen era la mejor alternativa para el final de la carrera. Esto obligó a Mercedes a hacer una nueva parada en boxes con Lewis, quien terminó sumando el punto de la vuelta rápida. Sin embargo, Bottas estuvo al borde de quitárselo, pues hizo la vuelta más rápida de la carrera en el giro anterior, a pesar de que Mercedes le dijo por radio que abortara el intento.
La sorpresa: McLaren
McLaren no ha estado a la altura este fin de semana, claramente un paso por detrás de Ferrari y de Alpine. Desde que comenzó el fin de semana mostraron síntomas de flaqueza e incluso Lando Norris se quedó fuera de la Q3 por primera vez esta temporada. En carrera, el piloto británico sumó un punto, mientras que Daniel Ricciardo cayó fuera del Top 10.
Esto les hizo volver a perder la tercera posición en el Campeonato de Constructores en favor de Ferrari, que este fin de semana ha estado fuerte. Eso lo aprovecharon para sumar puntos y aventajar a McLaren por 11 puntos y medio.
El duro: Fernando Alonso
Fernando Alonso ha demostrado un muy buen ritmo este fin de semana en Zandvoort, a pesar de que Esteban Ocon consideró que era demasiado lento en los primeros compases de la carrera. Aún así, el español terminó la carrera en la sexta posición y su compañero de equipo lo hizo en la novena. Fernando reveló que estaba ahorrando neumáticos en los primeros giros, algo que después sería clave.
El de Alpine clasificó en la novena posición y finalizó sexto tras un gran adelantamiento a Carlos Sainz en la última vuelta. Su ritmo sorprendió, aunque Alonso era consciente de que quizá no hubiera sido posible si los McLaren hubieran estado fuertes como en fines de semana anteriores.
El espectáculo: Los aficionados
Los aficionados neerlandeses han sido los más vistosos de los últimos años. Siempre han teñido de naranja las gradas de cualquier circuito al que fuera la Fórmula 1, demostrando su apoyo a Verstappen. Por eso, cuando se hizo oficial la noticia del regreso de Zandvoort al calendario, una de las cosas en las que muchos pensaron era en sus fans.
Y así ha sido. Las gradas se han teñido por completo de naranja, era complicado ver a aficionados que no fueran seguidores de Max. Incluso cuando sonó el himno local, antes y después de la carrera en honor a Verstappen, se podía escuchar a capella, sin necesidad de música. Incluso Alonso afirmó que uno de los atractivos del regreso de Países Bajos al calendario era Max. Este año, que puede ser Campeón del Mundo, era aún más evidente que el apoyo sería máximo. Así ha sido y ha sido uno de los grandes espectáculos del fin de semana.