Por segundo año consecutivo, Gerard Farrés y Armand Monleón comparten el Can-Am de Monster Energy en la categoría SSV. Ambos ya aterrizaron en Arabia Saudí hace un par de días y han compartido unos minutos con sus seguidores en un live a través de Instragram, tras realizarse la segunda PCR que les ha dado acceso a la burbuja del Dakar al confirmarse su negativo.
Gerrard Farrés acabó segundo en la edición de 2019, pero su primera experiencia con Armand Monleón no fue como ambos esperaban. La gran ambición era hacerse con la victoria general, pero tan solo llegaron tres de etapa y un undécimo puesto sobreponiéndose a muchos problemas.
Monleón comentó lo importante que es mantener la cabeza entretenida para no perder los nervios esperando los resultados de la PCR definitiva: “Con la segunda PCR esperamos ese correo, nos ponía algo nerviosos”. Asegura que toda la prevención es poca y que el miedo está ahí: “Es fácil contraer el positivo. Ahora con aviones y viajes, con gente que ha pasado la Navidad y no sabes que ha podido pasar”
Ambos desean realizar el shakedown al recoger el coche: “Rodaremos unos kilómetros para ver cómo está todo. Es coche que es nuevo y esperemos que esté todo en su sitio, lo hemos probado ya, eso sí”, comentaba Monleón. “Hay que tener mucho cuidado con la mecánica. Controlar el ritmo en cada etapa y ver cómo controlar el coche en cada momento, sin mirar más allá”, añadía para finalizar.
Por su parte, Farrés asegura que ha tomado todas las prevenciones que ha podido, pero aun así sigue alejado de los compañeros: “Se está haciendo duro y hemos luchado para llegar bien, estamos perdiendo la vida social evitando todos los contactos, ahora con reuniones de equipos y demás piensas ‘a ver si este lo va a tener’”.
Algunos pilotos inscritos al Dakar no han podido salir de su país de origen por cancelaciones de vuelos o problemas administrativos. Farrés da gracias por la suerte que han tenido: “Si, hemos tenido suerte con el apoyo de todos los patrocinadores. Muchos compañeros rusos, argentinos han tenido más problemas con muchos vuelos para llegar a Jeddah”.
Al igual que su copiloto, admite que el objetivo es mantener el coche a salvo y que los problemas los respeten: “Esperamos que nos respete la mecánica, no pensaremos a lo lejos, tenemos que ir etapa a etapa”.