Dos años y medio después, Daniel Ricciardo ha vuelto al podio gracias a un tercer lugar en el Gran Premio de Eifel. El australiano ha aprovechado el abandono de Valtteri Bottas y por primera vez se ha mojado en champán como piloto de Renault, quienes también han conseguido su primer podio desde su regreso a la Fórmula 1 en 2016.
Ricciardo sostiene que ha pasado mucho tiempo (desde Mónaco 2018 no lo conseguía) y se siente muy feliz por el resultado. Era algo que esperaba desde hace mucho tiempo. Además, era uno de sus objetivos que se marcó cuando llegó a Renault en 2019. El australiano y el jefe de equipo, Cyril Abiteboul, tendrán que hablar de su apuesta del tatuaje.
«Hace mucho tiempo que no estaba aquí y siento como si fuera mi primer podio. Hace dos años y medio que no estoy aquí y el sentimiento es increíble. Es como si fuera nuevo aquí… llevábamos mucho tiempo esperándolo. Es real, va a pasar. Tendremos que pensar en el tatuaje, probablemente algo que tenga que ver conmigo pero con algo aleman porque es aquí donde lo hemos conseguido», ha comentado Ricciardo.
Ricciardo asegura que el periodo de coche de seguridad les ha sido de gran ayuda para conservar el podio y sostiene que está encantado con este tercer lugar. El australiano abandonará el equipo tras 2020 y pondrá rumbo a McLaren, pero no hay duda de que se está dejando la piel por Renault hasta la última carrera. Además, ya es cuarto en el Mundial de pilotos.
«Creo que viendo nuestro rendimiento en las carreras anteriores era algo que podía llegar y estoy muy feliz de haberlo hecho. La carrera ha estado muy ajustada y hemos debatido incluso de hacer una segunda parada, pero el coche de seguridad nos ha dado una ventaja. Hemos hecho una segunda parada y todo ha ido bien, ha sido un gran día», ha expresado Daniel para cerrar.